Por Eugenio Tuma
El Estado siempre ha pensado en construir viviendas según los lugares de trabajo o estudio de sus habitantes. Temuco, por ejemplo tiene una alta demanda de vivienda pues desde las comunas se piensa en los estudios de los hijos, y se invierte en espacios habitables con ese objetivo. La migración forzosa por educación.
Sin embargo, durante la pandemia, la educación ha sido la primera que ha debido migrar a su trabajo en línea, es así que la necesidad de desplazarse hacia las urbes para obtener una buena educación, bajo este contexto sería una exigencia menos para quienes viven en comunas distantes.
Por lo anterior, la oferta de subsidios ya no podrá concentrarse en las urbes sino que tendrá que responder a las necesidades por mucho tiempo postergadas en las comunas tanto en la habitabilidad urbana como rural.
Otro de los efectos es la creciente eliminación de los espacios para oficinas, cuyas labores hoy se realizan desde los hogares o con menor personal, donde una realidad es que la automatización y la desaparición de profesiones y oficios es inminente. Y para eso debemos estar preparados en la formación, allí el llamado es a las universidades a repensar su oferta formativa, así como a las instituciones del Estado como SENCE, SERCOTEC, CORFO y otras que proveen de programas de capacitación que deberán migrar hacia las necesidades que exige la industria hoy, en un escenario donde las comunicaciones en línea serán claves en el ejercicio de diversas funciones.
Ya no sólo se deberá responder a lo que la región necesita, sino a lo que el mundo está requiriendo para esta nueva forma de desarrollo y productividad.
El desafío de la conectividad implica en la región DEMOCRATIZAR la conectividad, no podemos exigirle a un estudiante que vive en el sector 3 cerros de Padre Las Casas, a sólo minutos de la capital regional que asuma el costo de no tener acceso – siquiera- a telefonía celular. No es posible que sigamos viviendo en Chiles Paralelos ni en Araucanías Paralelas donde el progreso llega a las urbes y no a la región completa.
En este contexto es que mi apuesta como Gobernador Regional es a instalar en la mesa de diseño a un consejo asesor permanente en materias relevantes como educación, empleo y productividad que integren Universidades, gremios, municipios y otros, para que ya no como una política centralizada sino surgida desde los estudios y la experiencia en los territorios, seamos protagonistas de la reactivación de La Araucanía cumpliendo los desafíos de una sociedad post pandemia.
Dejar una contestacion