Un duro proceso de operaciones, tratamientos de recuperación, viajes agotadores y mucho estrés familiar, es el desafío que ha debido atravesar la pequeña Mía Antonella, de tres años. ¿La causa? Un diagnóstico de alto riesgo que presenta cifras de mortalidad entre el 50 y el 85 por ciento de los casos en el primer año de vida. Se trata del “Síndrome de VACTERL/VATER” que, en el caso de Mía, significó que al nacer la bebé presentó malformaciones congénitas caracterizadas por la presencia de atresia anal (ano imperforado), anomalías renales (Hidroureteronefrosis derecha), defectos cardiacos (formen oval permeable + CIV) y defectos vertebrales (ausencia de las dos últimas vértebras sacras).
Todo esto ha impedido a Mía tener una vida normal, debido a las constantes intervenciones y procedimientos médicos a los que ha debido ser sometida y que, al menos, significará pasar tres veces más por el quirófano.
Actualmente, Mía vive junto a sus padres en la ciudad de El Salvador (Región de Atacama) y ha escrito, junto a su familia, una historia de valentía que comenzó a los 13 días de nacida, cuando fue sometida a su primera colostomía de emergencia. Por otra parte, luego de tres operaciones de alta complejidad, además de los malestares físicos de la menor y el desgaste emocional que ha significado para todo su núcleo, sus padres han acumulado cuentas médicas por más de 25 millones de pesos y un estado de preocupación permanente por los más de 30 millones que significa el resto del proceso. Monto muy por encima de sus capacidades económicas.
Según explica Joceline Fuentes López, madre de Mía, “son necesarios más de 50 millones sólo para cubrir los gastos de operación y hospitalización, aparte de alojamiento, transporte, insumos para su recuperación post operatoria en casa y gastos anexos. Estimamos que todo su proceso superará los 70 millones de pesos, cifra inalcanzable para nosotros”. En este escenario es que comenzaron una campaña denominada “Lukatón: Otro Paso Para Mía”, a través de la que invitan a toda la comunidad a aportar para ayudar a la pequeña a superar los procedimientos de corrección de las malformaciones presentes en su cuerpo, para lograr una vida normal y completa.
“Ahora estamos a la espera de juntar recursos económicos para que se le realice la reconstrucción ano rectal y la reconexión y cierre de colostomía, 3 operaciones diferentes que se deben realizar con una separación de varios meses. Por eso comenzamos una lukatón para que todos los que nos puedan apoyar de la manera que sea, lo hagan. Todo sirve”, explicó Joceline Fuentes López.
Si deseas aportar con la recuperación de Mía, puedes ️colaborar en la cuenta RUT: 16.750.997-5 de Joceline Fuentes López.
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