Un gran ejemplo para la comunidad, entregaron los integrantes de la comunidad educativa de la Sala Cuna y Jardín Infantil Perün Rayen de Licán Ray, quienes con motivo del Día Mundial del Agua, realizaron una limpieza en la ribera del lago Calafquen.
La celebración contempló varias actividades para estimular a los niños y niñas respecto al cuidado del medio ambiente y a que valoren al Pueblo Mapuche.
A primeras horas de la mañana, una cuenta cuentos de esta cultura ancestral, relató varios cuentos (epeu), a los menores y a sus padres, cuyos protagonistas estaban profundamente vinculados al agua.
Posteriormente, esta comunidad escolar se trasladó hasta la playa, lugar en el que los niños saludaron al Gnemdel agua (espíritu protector), para luego junto a sus familias y tías, realizar una completa limpieza de la arena, reuniendo principalmente colillas de cigarro, uno de los elementos más nocivos, ya que una sola colilla contamina 100 litros de agua.
“Para nosotros el agua es fuente de vida. Durante toda esta semana hemos inculcado en los niños lo importante que es el agua para el planeta. Hoy quisimos que observaran su entorno y aprecien la vida natural, realizamos con ellos una limpieza preventiva ya que el lago en invierno sube y se lleva mucha basura. Limpiamos principalmente colillas de cigarros para que no se la coman las aves y no lleguen al fondo del lago”, comentó Mónica Paillamilla asesora intercultural de los jardines VTF de la Municipalidad.
Esta unidad educativa, abrió sus puertas hace más de una década en esta localidad y desde entonces se ha convertido en el principal centro de educación pre escolar cuyo sello educativo está principalmente enfocado al cuidado del medio ambiente y al rescate y valoración de la cultura Mapuche.
Ana María Matus de la Parra, directora de la Sala Cuna y Jardín Infantil Perün Rayen de Licán Ray, explicó: “Cómo jardín con un sello educativo ambiental e intercultural no podíamos estar ajenos de estas celebraciones. La actividad ha sido un acierto ya que nos dimos cuenta que la gente tiene muy poca conciencia respecto a la basura. Agradecemos a nuestros padres y apoderados ya que han demostrado un gran compromiso con el cuidado de la naturaleza”, puntualizó la educadora.
Más del 50 % de los menores que asisten al Jardín Perün Rayen, son de ascendencia Mapuche, por lo que para las educadoras y el equipo de profesionales que diariamente atiende a estos pequeñitos, es de vital importancia la consideración e integración de las costumbres y tradiciones de esta cultura milenaria en el quehacer cotidiano.
“Sin duda un gran ejemplo es el que han dado estos pequeñitos, quienes tienen claro que la tierra hay que cuidarla y sobre todo porque saben que es el hábitat de muchas especies que hoy viven en uno de los pocos lagos que aún no se ha contaminado”, concluyó el Alcalde Pablo Astete”.
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