El mal aliento y la importancia de la limpieza de la lengua para combatirlo

Uno de los aspectos más desagradables cuando estás hablando cerca de una persona es notar que le huele mal el aliento. Es un problema bastante común y que padece con asiduidad gran parte de la población debido a las bacterias que se acumulan en la boca, y sobre todo, en la lengua. Para prevenir y acabar con el molesto mal aliento, una gran solución es utilizar limpiadores linguales que eviten la proliferación de bacterias en esta zona. Vamos a conocer sobre ellos y sobre todas sus ventajas.

Los malos olores son siempre desagradables de notar y más cuando éstos provienen directamente de la boca de una persona. Cuando somos nosotros los que desprendemos el hedor puede causarnos desde vergüenza hasta ansiedad, pudiendo dañar seriamente nuestras relaciones personales y laborales.

El mal aliento, también conocido como halitosis, es un problema que sufre gran parte de la población en su día a día, en mayor o menor medida. Hay personas que son muy sensibles a los olores, y enseguida lo notan, mientras que otras pueden no darse cuenta de nada hasta que alguien se lo dice. Pero cuando el problema aparece o tenemos tendencia a que se ocurra y queremos prevenirlo, nada mejor que usar un  limpiador Lingual Halita para eliminar las bacterias productoras de gases malolientes que se acumulan en la boca y en la lengua.

¿Qué provoca el mal aliento?

Existen muchas causas que pueden hacer que estas bacterias se acumulen en la boca y provocan la halitosis. Una de las posibles causas está directamente relacionada con la ingesta de alimentos y la descomposición de los mismos en la boca y entre los dientes. Además, existen alimentos en especial, que al digerirlos causan también mal aliento como puede ser la cebolla, el ajo o determinadas especias muy fuertes.

El tabaco también puede ser una causa de mal aliento, ya que deja en la boca una serie de sustancias olorosas, así como no permite tener una higiene bucal correcta. No cepillarse los dientes o no utilizar los productos necesarios como un limpiador lingual con regularidad hace que se acumulen las bacterias en la boca y que, incluso, se forme la llamada placa en los dientes, una especie de película de bacterias que puede formar bolsas e irritar las encías.

También hay otros factores que pueden afectar a este problema y que estarán directamente relacionados con la salud. Desde tomar determinados medicamentos que provoquen mal olor en la boca, a padecer de xerostomía o enfermedad de la boca seca, que contribuyen al mal aliento por la escasa producción de saliva. Las infecciones en la boca también pueden ser causa de este problema, así como otras afecciones en la garganta o trastornos metabólicos.

Cómo combatir el mal aliento

Si buscamos un método muy eficaz para erradicar el mal aliento o halitosis, lo mejor es usar un limpiador lingual. Se trata de un utensilio que permite efectuar una limpieza completa de la lengua de una manera fácil y sencilla. Su diseño cuenta con dos caras: una ondulada para su uso en la depresión central de la lengua, y otra lisa, para utilizar en la zona de los laterales. Es precisamente en la lengua donde se van a ir acumulando la mayoría de las bacterias, entre las que se incluyen las anaerobias productoras del mal aliento, por lo que al usar un limpiador lingual nos aseguramos de eliminarlas al 100%.

Su uso es muy sencillo y requiere seguir una serie de pasos básicos e intuitivos. En primer lugar, hay que agarrar el limpiador lingual por el mango y empezar a limpiar por la parte central de la lengua, por la cara que presenta ondulaciones. Para que su uso sea más efectivo y llegue hasta la parte más profunda de la misma, lo ideal es sacar la lengua para que el limpiador pueda hacer un mayor recorrido. El movimiento a realizar es aconsejable que se haga desde atrás hacia delante. Una vez que hemos limpiado correctamente tras unas cuantas pasadas en la zona central, tenemos que enjuagar el limpiador con agua.

El siguiente paso es utilizar la parte lisa del limpiador lingual para la zona de los laterales de la lengua. Después de cada pasada hay que aclarar el limpiador con agua y, una vez que hemos terminado, nos enjuagamos la boca con abundante agua y ya hemos terminado el proceso. Un método muy sencillo y rápido que supone una gran efectividad para combatir y prevenir el mal aliento.

Tener un buena higiene bucal diaria

Uno de los remedios más eficaces para prevenir y acabar con el mal aliento es tener unos buenos hábitos diarios de higiene dental y bucal. Cepillarse los dientes después de cada comida, usar hilo dental o enjuague bucal, son algunos pequeños pasos que pueden ayudar mucho a combatir este problema tan desagradable. Si combinamos el uso del limpiador lingual con un buena higiene bucal diaria en la que se incluye el cepillado de dientes, el uso del hilo dental y del enjuague bucal, estaremos más que de sobra protegidos de la aparición de la halitosis.

Pero para prevenir cualquier tipo de eventualidad y quedarnos más tranquilos, siempre se pueden tener a mano caramelos o chicles que pueden sacarnos de un apuro eventual cuando no hemos tenido la oportunidad de realizar nuestra rutina de higiene bucal por algún inconveniente puntual. Éstas son soluciones no duraderas, pero que pueden ser de mucha ayuda en un momento dado.

Adaptar una buena rutina de higiene bucal es esencial para cuidar la salud de esta parte tan importante del cuerpo y prevenir el molesto problema que supone tener mal aliento. Si a esto le sumamos la eficacia de un limpiador lingual de uso diario, tenemos la combinación perfecta para combatir este inconveniente de una manera rápida y sencilla. Poner fin al mal aliento es ahora más sencillo que nunca siguiendo algunas de las indicaciones que hemos comentado anteriormente, para volver a empezar a recuperar una mayor calidad de vida.

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