La creación de las obras fue trabajada durante tres meses en talleres ejecutados como parte del proceso reparatorio y reinserción social de niños, niñas y adolescentes que se encuentran en Centros de Sename
En el Museo Regional de La Araucanía, durante tres días niños, niñas y adolescentes de Centros de Protección y Justicia Juvenil del Sename expusieron sus obras pictóricas y textiles, resultado del trabajo de tres meses en los talleres artísticos que se desarrollan en apoyo a sus procesos de reparación de la vulneración de sus derechos y reinserción psicosocial.
Las obras, tanto pictóricas como textiles, que fueron trabajadas por los niños, niñas y adolescentes del Centro de Reparación Especializada de Administración Directa, Cread Alborada; y del Centro de Internación Provisoria y Régimen Cerrado, CIP-CRC Cholchol, a cargo de las profesionales Carolina Palma y Leticia Santander, respectivamente, incorporaron colores y simbologías característicos de la cultura mapuche, en la búsqueda del establecimiento de la coherencia con el contexto expositivo, poniendo en valor aspectos identitarios propios de nuestra región.
Leticia Santander, licenciada en arte y tallerista del CIP-CRC Cholchol explicó que “las obras son creadas en el contexto privativo de libertad, “donde se busca la responsabilización y validación social y desarrollar las habilidades blandas que son la base para trabajar en la reparación y reinserción social, por lo que la exposición pública de estas obras es un gesto que acerca a los niños, niñas y adolescentes a esta validación social que para ellos es significativa y adquiere una fuerza e impacto mayores”.
La exposición es resultado del trabajo realizado al interior del taller de arte de los dos centros dependientes del Servicio Nacional de Menores, Sename y cuyas características es que representan a dos de las áreas de gestión institucional, correspondiente en el caso del Cread Alborada a uno de protección de derechos y atención a infancia vulnerada; y, al CIP CRC Chol Chol, que es un centro cerrado para adolescentes infractores de ley.
Para la directora regional del Sename, Claudia De La Hoz, el trabajo de talleres al interior de estos centros es de gran importancia por la vinculación que ejerce: “La educación artística trasciende los objetivos propiamente plásticos, convirtiéndose en un instrumento de intervención social, con gran potencial terapéutico. Es una herramienta que en el ámbito de la intervención infanto-juvenil nos permite acompañar procesos reparativos y de habilitación social, tanto en niños como adolescentes”.
De acuerdo a las profesionales que intervienen en estos procesos reparatorios de niños, niñas y adolescentes, desde el arte es posible enmendar y corregir fisuras del ser interno, enfrentándose a los límites que impone superar la dificultad, pero también, encontrar soluciones y hacerse más tolerantes frente a la frustración.
Las obras se inspiraron en la técnica del telar mapuche, rescatando la identidad local como referencia y temática, otorgando reivindicación y reconocimiento a la cosmovisión mapuche.
Dejar una contestacion