Columna de opinión de Directora SENDA Araucanía, Lissy Cerda

IMG_3817

Desde el Servicio Nacional para la Prevención y Rehabilitación del consumo de Drogas y Alcohol (SENDA), se considera octubre como el Mes de la Recuperación de personas con consumo problemático de alcohol y otras drogas, período en el que se busca sensibilizar e informar a la comunidad acerca de la importancia de comprender que la recuperación es posible y es una oportunidad para generar conciencia sobre los desafíos que enfrentan las personas en este camino, promoviendo la importancia del tratamiento y la integración social.

El consumo de drogas es un asunto de salud pública, es dinámico y evoluciona de manera constante, lo que plantea permanentes retos a las soluciones y respuesta que puede brindar el Estado. Para abordar estos desafíos, SENDA, ha impulsado un Plan de Acción 2024-2030 de la Estrategia Nacional de Drogas, que permite tener objetivos claros a largo plazo, sostenibles y medibles.

En nuestra región, SENDA, cuenta con una red de 22 centros de tratamiento que considera convenios con organizaciones y servicios de salud, donde se implementan los diferentes programas que el Estado pone a disposición de la ciudadanía de manera gratuita. Anualmente en La Araucanía se atienden en promedio a más de mil personas a través de los distintos programas de tratamiento, tanto para población adulta como para niños, niñas y adolescentes.

Posteriormente al tratamiento debemos avanzar considerablemente en buscar y apoyar procesos de inclusión social de personas con consumo problemático de drogas, favoreciendo que su recuperación sea sostenible en el tiempo. Es por ello que en la región se está implementando una red de integración social que permite consolidar y complementar la articulación intersectorial, vinculándonos activamente de manera colaborativa con Fosis, Sence, Seremi de Vivienda y otros.

Sabemos que debemos generar espacios de acompañamiento a las personas, por eso desde el año 2025 contaremos en la región con una Vivienda de Apoyo a la Integración Social (VAIS) para mujeres, lo cual es una instancia habitacional transitoria. Además, actualmente contamos con un programa de Orientación Sociolaboral (OSL), que apoya a las personas a desarrollar competencias sociales y laborales, facilitando su inserción en el mercado de trabajo, para que puedan recuperar la autonomía en sus vidas. Por otra parte, apoyamos la vinculación con la oferta social, lo cual conecta a personas en proceso de recuperación con beneficios sociales, como acceso a salud, educación y empleo. Por otra parte, buscamos la reducción de estigmas, desarrollando acciones de integración basadas en el respeto a los derechos humanos, ya que la estigmatización, y posterior discriminación, causan rechazo social y perpetúan la exclusión social.

Por lo mismo, quiero hacer una invitación a la comunidad, a ser parte del trabajo que se está realizando. La recuperación no es solo un camino individual, es un esfuerzo colectivo donde cada persona puede hacer la diferencia. Súmate, brindando apoyo, compartiendo información y creando entornos que favorezcan la integración social.

Sé el primero en comentar

Dejar una contestacion

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.