El Papa Francisco decretó la dimisión del estado clerical y la dispensa del celibato de José Vicente Bastías Ñanco, tras un extenso proceso penal canónico por denuncias de abuso sexual a menores. La decisión es inapelable.
El Obispado de Temuco, informó la expulsión del estado clerical del sacerdote José Vicente Bastías Ñanco, tras comprobarse su responsabilidad en la comisión de «delitos canónicos gravísimos». La decisión, tomada por el Papa Francisco a través del Dicasterio para el Clero, también implica la dispensa del sagrado celibato y de las demás obligaciones inherentes a la ordenación sacerdotal.
Según detalló la Diócesis, la resolución se da luego de «un proceso administrativo penal canónico de varios años, durante el cual se llevaron a cabo diversas diligencias y procedimientos que, junto con el testimonio de muchas personas, por un lado, y el uso de la legítima defensa del acusado, sus testigos y abogados, por otro, tuvieron como resultado esta pena definitiva».
Las denuncias contra Bastías Ñanco datan al menos de 2018, momento en que fue suspendido del ejercicio público del ministerio mientras se investigaban los hechos. El ahora exsacerdote se desempeñó en la Parroquia «La Anunciación del Señor», ubicada en el sector Pedro de Valdivia de Temuco.
Desde el Obispado enfatizaron que «contra esta inapelable decisión no puede interponerse recurso alguno». Asimismo, hicieron un llamado a la comunidad a reflexionar sobre lo sucedido y solidarizar con quienes han sido afectados: «Exhortamos al Pueblo de Dios a orar por todas las personas afectadas, de una u otra forma, en este proceso que termina con esta sanción definitiva».
Este caso se suma a otros episodios que han golpeado la credibilidad de la Iglesia Católica en Chile, en medio de los esfuerzos por abordar las denuncias de abusos cometidos por miembros del clero. Hasta el cierre de esta nota, Bastías Ñanco no ha emitido declaraciones públicas sobre el fallo.
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