Las personas que padecen de osteoartritis, artritis o artritis reumatoide, pueden padecer un verdadero infierno durante la época de invierno, pues la rigidez muscular y los dolores articulares que suelen aumentar durante el frío, les impiden vivir con la calidad de vida que se merecen
El invierno este año parece que llegará bien seco y bastante frío, tal y como se han hecho sentir las temperaturas en los últimos días, el frío genera diversas incomodidades que pueden afectar la salud de las personas. En ese sentido quienes sufren enfermedades como la osteoartritis, artritis o artritis reumatoide, le temen a las temperaturas bajas e incluso bajo cero, ya que les genera fuertes dolores debido a su padecimiento.
Se aproximan los meses más fríos del año y por este motivo es importante conocer los sencillos aliados de la naturaleza que pueden complementar el tratamiento de estas enfermedades, que hacen sufrir más a quienes las padecen durante estos meses.
Los dolores que se agudizan con el frío son muy fuertes y en muchos casos, no ceden ni al tomar calmantes. Se sabe que el origen de la rigidez y el dolor es la inflamación en el caso de la artritis, por eso para disminuir esos efectos dolorosos existe una raíz llena de beneficios terapéuticos para la salud, la cúrcuma longa.
Existen medicamentos naturales que contienen los principios activos de esta planta de origen natural. De esta manera, se han realizado estudios que certifican que el aceite obtenido de la cúrcuma longa posee grandes propiedades antiinflamatorias y antioxidantes que juegan un papel protagónico en este tipo de enfermedades, ya que es capaz de suprimir las enzimas del cuerpo que generan la inflamación típica de estos padecimientos.
Cientos de estudios se han realizado para analizar las bondades de la cúrcuma, su importante característica antiinflamatoria es una de las más codiciadas, al respecto María Elena Rudolphi, químico farmacéutica de Farmacias KNOP indica “la curcumina es la sustancia que permite que la cúrcuma sea tan potente como antiinflamatorio, es por esto que en muchos casos se utiliza como coadyuvante de tratamientos de la artritis”.
Agrega que “es distinta la eficacia de ingerir cúrcuma en alimentos que en concentrados, por eso lo ideal para las personas que padecen alguna enfermedad dentro de los distintos tipos de artritis, se pueden ver beneficiadas al complementar su tratamiento con productos como Turmerik, ya que estas cápsulas de aceite de Cúrcuma Longa estandarizado, por su alta concentración del activo natural, actúa con acción antiinflamatoria ayudando a desinflamar las articulaciones, incluso las que están con rigidez”.
Además, otra medida que puede entregar resultados benéficos frente a la inflamación, para disminuir el sufrimiento en los fríos días de invierno, puede ser la utilización de árnica, por medio de la aplicación de ungüentos, tal como el Lefkaflam que en conjunto con sus otros componentes del reino vegetal, genera calor en la zona afectada y alivia el dolor gracias a su acción rubefaciente.
Es importante llevar un control con el médico especialista de confianza y conocer todas las herramientas que, tal como indica la especialista, “pueden ayudar a controlar el dolor y la rigidez, mejorando la calidad de vida de los pacientes con osteoartritis, artritis o artritis reumatoide”.
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