Con una desocupación que roza el 10% y más de 154 mil personas trabajando informalmente, La Araucanía vive uno de los momentos laborales más críticos del país. La región se convierte en la más afectada por la precarización del empleo, según el último Termómetro Laboral.
La Araucanía enfrenta un grave retroceso en materia laboral. Según el más reciente Termómetro Laboral del Observatorio Laboral de La Araucanía, la región registró un desempleo del 9,8% en el trimestre marzo-mayo de 2025, cifra que supera en 0,9 puntos porcentuales al promedio nacional (8,9%) y que evidencia el duro golpe que ha significado el fin de la temporada estival para la economía regional.
Pero eso no es todo. El informe revela otro dato que enciende aún más las alarmas: La Araucanía lidera la informalidad laboral en Chile, con un 35,4% de trabajadores en esta condición, muy por encima del promedio nacional de 26%.
Camilo Rosas, director del Observatorio Laboral regional, explicó que si bien esta tendencia es habitual tras el verano, este año la situación se agudizó: “Lo que observamos este trimestre es un escenario especialmente contrastante: hay más personas ocupadas que hace un año, pero también más desempleo”, señaló.
Y agregó con preocupación: “Esto evidencia que el mercado no está dando respuesta a las necesidades laborales de la región. Por ello, es clave avanzar en mecanismos que no solo impulsen la recuperación, sino que también generen oportunidades de empleo formal y sostenible en el tiempo, especialmente en una región con brechas estructurales como la nuestra”.
Uno de los indicadores más preocupantes es el desempleo de larga duración, que afecta al 13,2% de las personas sin trabajo, es decir, miles de habitantes llevan más de un año buscando empleo sin éxito. Este factor profundiza el riesgo de caer en la informalidad y quedar fuera del sistema de protección social.
Actualmente, 154.143 personas trabajan de forma informal en La Araucanía. De ellas, un 59,6% son trabajadores independientes, que muchas veces no cuentan con acceso a cotizaciones previsionales ni derechos laborales básicos.
La seremi (s) del Trabajo y Previsión Social, Carolina Ojeda, reconoció la gravedad del escenario: “Como Gobierno reconocemos la complejidad del escenario laboral, con un alto desempleo e informalidad. Nuestro compromiso es fortalecer el empleo formal, especialmente en sectores que muestran dinamismo como el comercio, la educación y el silvoagropecuario, junto con impulsar estrategias para abordar el desempleo de larga duración, avanzando en una recuperación económica que garantice mayor empleabilidad y la protección de los derechos laborales para todos”.
Un rayo de esperanza: el comercio da señales positivas
En medio de esta crítica situación, hay sectores que muestran cierto dinamismo. El comercio lidera la creación de empleo en la región, con más de 10 mil nuevos puestos de trabajo en un año, representando el 19,8% de toda la ocupación regional. Le siguen los sectores silvoagropecuario y educación, que también han contribuido al alza del empleo.
Los trabajadores de servicios y ventas protagonizaron el mayor aumento, con 11.917 nuevas personas empleadas, lo que representa una quinta parte del total de ocupados en la región.
Además, el análisis del Producto Interno Bruto Regional (PIBR) del primer trimestre de 2025 muestra una relación directa entre crecimiento económico y generación de empleos asalariados, especialmente en el sector privado y bajo condiciones formales.
No obstante, los expertos coinciden: los avances en ciertos sectores no alcanzan a revertir la precarización que golpea con fuerza a La Araucanía. El desafío, tanto para el sector público como privado, es urgente y requiere acciones decididas para revertir esta tendencia que mantiene a miles de familias al borde de la vulnerabilidad.
Dejar una contestacion