A través del Consejo Consultivo de Jóvenes en Salud se busca integrar a los adolescentes en el tema de la prevención del embarazo entre sus pares. Esta instancia, liderada por la Seremi de Salud, está enfocada al fortalecimiento y mejoramiento del acceso a servicios y prestaciones de salud sexual y reproductiva. El trabajo es desarrollado en conjunto con Seremi de Educación, Unicef, Sernam e Injuv.
La sexualidad en adolescentes es dinámica y ha experimentado cambios importantes en las últimas décadas. La Séptima Encuesta Nacional de la Juventud realizada por el Instituto Nacional de la Juventud (Injuv) nos entrega datos importantes sobre la temática de sexualidad en los jóvenes de la Región. Uno de los de mayor relevancia observado de este instrumento es que los jóvenes de La Araucanía en promedio tienen una iniciación más tardía que el promedio nacional, a los 22 años sólo más de la mitad de los jóvenes se ha iniciado sexualmente (54%), esto se contrapone al promedio nacional el cual ya a los 20 años presenta un 53%.
Con respecto al uso de anticonceptivos, el 88% de los jóvenes de la Región ha señalado que en su última relación sexual han utilizado algún método anticonceptivo, por encima del 70% que se reflejaba al año 2009. Hoy en día cerca del 15% de los jóvenes de la Araucanía han señalado haber tenido un embarazo adolescente, este porcentaje se iguala al promedio nacional. Otro de los rangos asociados a esta temática es que del total de los jóvenes encuestados, sólo el 8% del rango masculino señala haber sido padres y 21% de las mujeres señala haber sido madre en periodo de adolescencia.
Este inicio precoz de la actividad sexual se relaciona con el embarazo adolescente, considerado una problemática social, que tiene como consecuencia, falta de oportunidades y debilitación de las perspectivas futuras de vida de la adolescente embarazada, su hijo (a) y su familia. El embarazo adolescente, se ha vinculado a múltiples determinantes sociales, entre las que se encuentran, bajo nivel socioeconómico, bajo nivel de escolaridad, ausencia de proyecto de vida, así como también se le ha relacionado con inequidades en el acceso a servicios de salud sexual y reproductiva.
Desde el punto de vista epidemiológico, el embarazo adolescente suele ser desagregado en dos grupos etarios, de mujeres de 15 a 19 años y mujeres menores de 15 años. Según las proyecciones del Instituto Nacional de Estadísticas, en Chile al año 2012, la población adolescente (10-19 años) asciende a 2.716.838, lo que corresponde al 15,6% de la población total; de estos, el 52% corresponde a adolescentes de 15 a 19 años y el 48% a adolescentes de 10 a 14 años. Con respecto a la distribución por sexo, el 51% corresponde a hombres adolescentes y el 49% restante a mujeres.
En cuanto a las cifras regionales se encuentra que en La Araucanía el año 2012 en el Servicio de Salud Araucanía Sur existía de un total de 8.600 gestaciones, 90 gestantes eran menores de 15 años y 1.800 correspondían a jóvenes de 15 a 19 años. En tanto, en el Servicio de Salud Araucanía Norte, 41 menores de 15 años presentaban embarazo, mientras 684 jóvenes 15 a 19 años eran gestantes, de un total de 3.154 gestaciones que se generaron el año pasado.
Estrategias preventivas
Dada la actual situación epidemiológica del embarazo adolescente, el Ministerio de Salud ha considerado incluir en sus objetivos sanitarios para la década 2011-2020, estrategias que permitan disminuir la tendencia que presenta este importante problema de salud pública. Estas tácticas han sido incorporadas en la Estrategia Nacional de Salud, con el propósito de dar cumplimiento a la meta de “disminuir en un 10% la tasa de fecundidad proyectada en población menor de 19 años” al año 2020.
Además, Chile se ha integrado al Plan Andino de Prevención de Embarazo Adolescente, implementando el Consejo Consultivo de Jóvenes en Salud, instancia enfocada a la prevención del embarazo en adolescentes y al fortalecimiento de la abogacía para mejorar el acceso a servicios y prestaciones de salud sexual y reproductiva. Está constituido por dos adolescentes representantes de cada región, quienes están bajo la supervisión directa de la Seremi de Salud, además de realizar un trabajo mancomunado con la Seremi de Educación, Injuv y Sernam.
Este 26 de septiembre a nivel mundial se celebró el Día de la Prevención del Embarazo Adolescente y para conmemorarlo el Consejo Consultivo de Jóvenes en Salud decidió realizar un taller a los jóvenes de la Región que quieran ser parte de esta instancia y que quieran adoptar los conocimientos necesarios para actuar como monitores en sus establecimientos y redes.
La Seremi de Salud, Gloria Rodríguez, dijo que “como sector salud nos interesa fundamentalmente prevenir el embarazo adolescente. En La Araucanía, más del 20% de los embarazos corresponden al grupo de adolescentes de entre 10 y 19 años, destacando que 131 gestaciones durante el 2012 correspondieron a menores de 15 años con todas las consecuencias para la salud que eso implica, entre las que se encuentran el bajo peso del recién nacido, parto prematuro, alteraciones en el desarrollo del niño, problemas de salud físico y mental en el menor y la madre, entre otras complicaciones. Por tal motivo se está trabajando en un programa de formación de monitores que se dedicarán fundamentalmente a la prevención del embrazo adolescente”.
Cristian Wetzel, director regional de Injuv manifestó que ”para el Instituto Nacional de la Juventud es importante el trabajo intersector en conjunto con los Ministerios de Salud, Educación y Sernam en materia de generar actividades como el Consejo Consultivo de Jóvenes en Salud formado el año 2011, talleres y charlas en materia de prevención del embarazo adolescente y así bajar los índices de vulnerabilidad social asociados como abandono prematuro de estudios secundarios y además sólo acceder a empleos precarios por falta de capacitación y oportunidades”.
Ricardo Coñoepan, asesor del Consejo Consultivo de Jóvenes en Salud, explicó que esta iniciativa se encuentra presente en todo el país. “Para nosotros es muy relevante mantener este tipo de reuniones con las autoridades, contar con cooperación internacional acá y en los seis países donde se está replicando esta experiencia. Esta tipo de actividades, de formación de monitores también es súper importante porque nos permite generar confianza para poder conversar con otros jóvenes y difundir el mensaje de la prevención”.
Rebeca Opazo, también miembro del Consejo Consultivo de Jóvenes en Salud, indicó que es fundamental el trabajo con los mismos jóvenes para “a través de ellos construir los cimientos para poder crear futuros programas y talleres donde se pueda trabajar en conjunto y abarcar todas las aristas que involucran el embarazo adolescente, así ir año a año disminuyendo las cifras que lamentablemente aún son alarmantes”.
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