El pasado 18 de agosto se cumplieron cuatro años y cinco meses de la enigmática desaparición de Gerónimo Eliseo Alarcón González, más conocido como el “Banana”. Su familia más cercana se rehúsa a bajar los brazos. “Como familia no tenemos los recursos necesarios para contratar a un abogado que pueda retomar la causa, y aunque la justicia haya parado la búsqueda, nosotros como familia no hemos bajado los brazos para encontrar a mi tío”, señala Pilar Díaz, sobrina de la persona desaparecida.
Gerónimo, que en esos momentos tenía 54 años, fue visto por última vez por su hermana Gloria Alarcón el 17 de marzo del año 2016, en momentos que él le indicara que iría por varios días a cortar leña en el campo de Carlos Manque Ñanco, ubicado en el sector el Liuco kilómetro 733, de Santa Juana perteneciente a Gorbea. Desde donde nunca regresó. “A mi tío Gerónimo Eliseo Alarcón González, se le pierde el rastro el día 18 de marzo del 2016 al haber concurrido el 17 de marzo del mismo año a un predio perteneciente a la Familia Manque Ñanco, ubicado en el sector el Liuco, Comuna de Gorbea, en ayuda de un familiar para pelar eucaliptus. Mi tío era una persona la cual presentaba diferentes condiciones, entre ellas epilepsia, aneurisma cerebral y alcoholismo, hecho que llevaba a mi mamá a una preocupación constante para evitar que esas condiciones volvieran afectarlo”, señala la sobrina.
Por su parte, la hermana de don Gerónimo contó cuando fue la última vez que vio al hombre. “Mi hermano pasó el día viernes 17 a decirme que iba a ir donde Carlos Manque a cortar leña y me pasó las llaves de su casa para que se las guardara como siempre lo hacía, luego Carlos lo pasó a buscar y se fueron… Posteriormente el día sábado me llama Carlos y me dice que Gerónimo se había venido a Pitrufquén el mismo día viernes, lo que me pareció extraño porque no había llegado, luego fui a buscarlo hasta donde Carlos y me dijeron que mi hermano ya se había ido y que se le había quedado su mochila con ropa y me la devolvieron”.
A pesar de todos los esfuerzos de búsqueda hechos por parte de su familia y su círculo más cercano, además de los amigos de Gerónimo como el Club de Pesca River Toltén, se desconoce el paradero y el desenlace de esta lamentable historia que involucra la desaparición de este vecino de Pitrufquén.
En tanto, Pilar Díaz comenta que la investigación fue demasiada tardía he incluso pasando por alto situaciones que generan bastante duda. “Como muchos sabemos la justicia chilena es bastante incoherente con cualquier caso que se les ponga en frente cuando la persona que necesita ayuda no tiene ni dinero ni poder, me atrevo a decir esto libremente, ya que, en este caso la investigación fue demasiada tardía he incluso pasando por alto situaciones que generan bastante duda como por ejemplo las declaraciones de algunas personas que dicen haber compartido con él y luego cambian las versiones de los hechos”.
Sin embargo, la familia agradece a todos quienes se han unido en la búsqueda de don Gerónimo; “agradecemos a todos esos amigos que actuaron mucho antes que la justicia en su búsqueda, organizando bajadas por el rio Donguil, además de subir y bajar cerros en el sector del Liuco, comuna de Gorbea, lugar desde donde desaparece, además de ser el lugar donde fue visto por última vez con vida y desde donde nacen bastantes contradicciones entre las personas que compartieron por última como familiares y personas externas”, señalan.
Por último, la familia realiza un llamado a todos quienes pudieran aportar con algún tipo de información. “Queremos hacer un llamado a las personas que puedan tener datos para que nos ayuden en la búsqueda de mi tío entregándolo a los familiares y las autoridades pertinentes. Pedimos especialmente a los que estuvieron con mi tío los últimos días y a las personas que tienen información, sobre su desaparición, para que hablen y aclaren los hechos que generan dudas, además de apelar a la conciencia de ellos, ya que tarde o temprano se encontraran con la justicia divina”.
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