Productores de papas afirman que de no existir barreras permanentes en la zona, se pone en riesgo denominación de Área Libre de Plagas y Enfermedades Cuarentenarias.
Un nulo avance en la propuesta comprometida por el Servicio Agrícola y Ganadero de reinstalar barreras sanitarias permanentes con el propósito de salvaguardar la producción agrícola de enfermedades y plagas cuarentenarias transportadas desde las regiones del centro -norte del país, denunciaron el diputado Jorge Rathgeb y la consejera Jacqueline Romero.
Ambas autoridades regionales manifiestan que dado el incremento del transporte de frutas, verduras y cereales, resulta imprescindible que se reinstalen barreras sanitarias permanentes con alta tecnología que adviertan la presencia de contaminantes que pudieran afectar de origen la producción de papas, arándanos, remolacha, trigo, tomates, lupino y otros productos cultivados en La Araucanía; y de paso consolidar a la región como Área Libre de Plagas y Enfermedades Agrícolas Cuarentenarias.
Según la consejera regional y presidenta de la Comisión de Agricultura del CORE, Jacqueline Romero, esta propuesta fue presentada y gestionada el año 2015 a la dirección nacional del Servicio Agrícola y Ganadero, SAG, y la Intendencia; estableciéndose que profesionales del SAG y el Gobierno Regional trabajarían en una propuesta definitiva para el cofinanciamiento de la instalación de estas barreras en a lo menos tres puntos de la zona: Collipulli, Victoria y Quepe.
“Lo que ha pasado – indica Romero- es que no hay un avance de esta propuesta lo que es preocupante porque existió un compromiso de avanzar en esta iniciativa y está la expectación de cientos de productores que ven en estas barreras una garantía de mayor control a la probable procedencia, traslado y comercialización de productos contaminados desde otras regiones. Recientemente nos reunimos con el SAG y esperamos que esta vez sí comience el trabajo pendiente por el bien de todos los productores de la región que no están libres de ser afectados por estas plagas, a pesar de las fiscalizaciones móviles realizadas por el SAG en la región”, señaló la consejera Romero.
Dicha preocupación es compartida por el diputado por Malleco, Jorge Rathgeb, que solicitó, a través de oficios desde la Cámara Baja, el urgente avance de la propuesta la que calificó como “relevante” para el desarrollo económico y sustentable de la agricultura en La Araucanía. “Por ley el Ministerio de Agricultura, a través del SAG, tiene el objetivo de contribuir al desarrollo agropecuario del país, mediante la protección, mantención y mejoramiento de la salud animal y vegetal, por lo que la presencia de estas barreras que nunca debieron desaparecer de sectores como la comuna de Renaico, es primordial para evitar el traslado de enfermedades y plagas cuarentenarias transportadas por productos o vehículos contaminados. Al no existir este control, se está dejando la puerta abierta a la propagación de estas afecciones agrícolas con graves consecuencias económicas para miles de agricultores que podrían ser infectados en sus cultivos. En este sentido, es que me parece preocupante que no haya un avance en estos compromisos”, señaló Rathgeb.
Área libre
Entre los privados y agrupaciones campesinas, la voz es similar. Es así que en reiteradas oportunidades han manifestado la necesidad de establecer un control permanente en la Ruta 5 sur, precisando que los controles fitosanitarios permanentes, no sólo podrían utilizarse para controlar el “ingreso de productos reglamentados al Área Libre”, sino que también para verificar la salida de cargas de productos contaminados provenientes de predios cuarentenados, con la correspondiente Guía de Libre Tránsito (GLT).
José Soto, presidente de la Asociación de Paperos Costa Araucanía, indicó que la presencia de barreras estables es fundamental precisando que hay alerta por la intención de productores de la región de los Ríos de gestionar e instalar barreras sanitarias permanentes en la zona de Lanco, con lo cual La Araucanía podría quedar fuera de la categoría de Área Libre de Plagas y Enfermedades Agrícolas Cuarentenarias.
“Hoy somos área libre, pero para poder seguir en esta categoría necesitamos más control a la entrada de productos que podrían resultar contaminados. Hoy las barreras móviles del SAG no tienen el mismo efecto que podría tener una barrera establecida que funciona las 24 horas del día y no sólo 8, además que necesitamos que aumenten las sanciones a quien transporte productos contaminados porque hoy las multas son tan bajas que los transportistas simplemente las pagan para poder dejar sus producciones en la región. Hoy necesitamos barreras sanitarias y lo que vemos es una falta de voluntad para apurar su concreción que según el SAG es muy costoso, pero por el contrario no miran el gran beneficio que estas barreras atraerían para el desarrollo agrícola y económico de la región”, señaló Soto.
Según el SAG, La Araucanía forma parte del Área Libre de Plagas Cuarentenarias; nominación que parte desde la provincia de Arauco hasta Magallanes. En este sentido, el servicio asegura que hay un control de la presencia de enfermedades y plagas agrícolas a través de barreras sanitarias móviles, no obstante, la presencia y aumento de focos de contaminación especialmente en la zona costera donde hay cerca de mil hectáreas cultivables declaradas contaminadas y en cuarentena, hace exigible por parte de los productores agrícolas una mayor fiscalización.
En este sentido, es que las autoridades regionales solicitan que el SAG cumpla con su compromiso y proponga y gestione con el Gobierno Regional el cofinanciamiento de estas barreras sanitarias en los próximos meses.
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