Chile es un país con una industria turística muy bien desarrollada. Por su condición geográfica, de ser una nación muy alargada, la diferencia de climas y relieves es tal que en algunos meses del año será recomendable viajar a una zona de Chile, pero a otras no.
Chile es un país de contrastes. No es lo mismo visitar Arica o San Pedro de Atacama que Pucón o Puerto Varas, ciudades que por cierto figuran en el reportaje https://viajerocasual.com/ciudades-mas-bonitas-de-chile/ como algunas de las más bonitas de todo el país. Mientras las dos primeras son ciudades de eternos veranos y días de sol, las segundas se caracterizan por los picos helados y volcanes cubiertos de nieve. Así de particular y diverso es Chile, por lo que hablar de la mejor época del año para visitar el país es sinónimo de decir, “depende”.
Dependerá siempre del lugar
Chile está totalmente ubicado en el hemisferio sur. Por esa razón, su situación climática es diferente a los países europeos y norteamericanos. Así, la época invernal es en junio y julio y la época de verano es justo en enero y febrero.
Además de eso, hay lugares que se ven y se disfrutan mucho mejor en una estación que en otra, como el caso del monumental desierto de Atacama, cuya información y curiosidades pueden ser leídas en el reportaje https://viajerocasual.com/desierto-de-atacama/, que es mejor visitarlo en la estación de verano -ya que su clima nocturno es menos arrollador y se pueden vislumbrar las lagunas y muchas especies autóctonas-, puesto que en invierno las lagunas se congelan y la temperatura nocturna puede llegar hasta los -25 grados.
No obstante, un consejo que darán todos los chilenos es que el sur se visite en verano y el norte se visite en invierno, o un par de meses antes de que comiencen ambas estaciones. De esa manera, se puede ver la mejor cara de ambos contrastes de Chile.
Aprovechar las ofertas de alojamiento
Chile es un país con una industria de la hostelería muy interesante, pero también con ofertas y alternativas para adaptarse a cada perfil de viajero, como es el caso de las mejores cabañas para alojarse en Chile, que permiten ahorrar dinero, estar en contacto con la naturaleza y no perder un ápice en cuanto a experiencia y comodidades, permitiendo también ver una cara más rural y cotidiana de todas las localidades de Chile.
Pero, en general, la temporada alta turística es entre diciembre y febrero, que es el periodo vacacional de la mayoría de las empresas de Chile, por lo que es también el momento en el que la mayoría de las familias chilenas hacen turismo, lo que encarece mucho el alojamiento. Por tanto, aprovechar las temporadas bajas de algunos sitios en particular es lo ideal sobre todo si se quiere conocer Chile sin gastar mucho.
Así, se podría visitar el sur justo después de finalizado el invierno o un par de meses antes del mismo; o visitar el norte unos meses antes de que comience la temporada de verano, que es cuando muchas personas sobre todo de otros países se dan cita en los destinos más icónicos.
La mejor época coincidiendo con la temporada alta turística
Muchas personas van a Chile pensando en diferentes cosas, no coincidiendo a menudo con los consejos generales. Por esa razón, sin importar si se va en busca de la mejor comida chilena y de un descubrimiento turístico a partir de la gastronomía, o si por el contrario se es fanático de las grandes postales y atardeceres, Chile tiene temporadas altas para todo y muy diferenciadas entre sí, dependiendo del lugar que se elija para hacer turismo.
Visitar la Patagonia chilena
En donde se encuentra uno de los parques más queridos de todos los chilenos, el Parque Nacional Torres del Paine, la Patagonia chilena es uno de los lugares más fríos y duros de todo el país, con temperaturas que incluso en el más caluroso de los veranos no superarán los 10 grados centígrados.
Por esa razón, la temporada alta para visitar esta región es siempre en verano, entre diciembre y febrero, porque de lo contrario será muy incómoda la experiencia, salvo que las temperaturas bajo cero no sean un problema.
Cascadas, volcanes y lagos
Si por algo se caracteriza toda la región del sur de Chile es por sus numerosos pueblos de pescadores, incontables parques nacionales y tierras protegidas -amén de la presencia del pueblo mapuche-, pero sobre todo por los volcanes, los lagos y las cascadas.
Teniendo en cuenta eso, los meses comprendidos entre diciembre y marzo son ideales para hacer un completo tour por esas regiones extensas, visitando toda la Región de Los Lagos y sus adyacencias.
Degustar el vino chileno
Chile es sinónimo de un sinfín de recetas e ingredientes, pero en el último tiempo la industria del vino se ha posicionado como una de las mejores del mundo, y por esa razón existe lo que se conoce como la Ruta del vino, que recorre varias localidades en las que los mejores viñedos muestran y guían a través de sus productos, fábricas, cultivos, en una experiencia inolvidable para cualquiera.
Precisamente, entre 1 o 2 meses antes de la llegada del verano y de la llegada del invierno, respectivamente, son las mejores épocas para visitar las rutas del vino chilenas, ya que contarán con un clima agradable para el recorrido, pero coincidirán también con el comienzo de las zafras, que es seguramente la experiencia que todos querrán tener.
Conocer Chile es sinónimo de elegir. El país es vasto, aunque fácil de recorrer; distinto y admirable a partes iguales. Siempre se debe valorar la experiencia indescriptible de la temporada alta, plagada de servicios y amenidades; o la paciencia y la calma -aparte de los buenos precios y ofertas- que permite la temporada baja, en la que se descubre un Chile más tranquilo, más coloquial y rural. Sopesar experiencias, costes y sobre todo temperaturas -que a veces varía demasiado entre una temporada y otra- será lo que permita a cualquier turista identificar el mejor momento para disfrutar de la apasionante nación austral.
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