Categorías: ActualidadAgenda

Efectos psicológicos tras el cambio de hora y la exposición a la luz solar en invierno

Muchas de las conductas del ser humano son aprendidas, y con el tiempo se transforman en hábitos, producto de la repetición de algunos patrones, dentro de los cuales encontramos algunos asociados a necesidades básicas como el sueño y la alimentación.

Cualquier cambio en nuestros hábitos requiere de un proceso de adaptación, para que nuestro organismo logre incorporar estas modificaciones. Estos cambios afectan de distinta manera de acuerdo a la edad de la persona, siendo los niños y los adultos mayores los que pudieran presentar mayores dificultades para este ajuste.

Esto es lo que ocurrirá el sábado 14 de mayo, cuando debamos atrasar a las 12 de la noche una hora nuestro reloj, razón por la cual –en lo posible– tenemos que prepararnos e intentar que este cambio se desarrolle de manera gradual, para que el desequilibrio sea menor. Así, la recomendación es comenzar a hacer estos cambios en el sueño unos 3 o 4 días antes del cambio de hora, de manera de estar más preparados para cuando se realice.

Además del cambio de hábito requerido, es importante tomar en cuenta que los cambios de horario pueden indirectamente provocar cambios en los estados de ánimo, por la falta de exposición a la luz solar, y el comenzar el día sin ella.

Existen numerosos estudios que demuestran la existencia de un cuadro psicopatológico que se denomina Trastorno Afectivo Estacional, que implica el cambio en el estado de ánimo en el sujeto, a partir de la estación del año en la que nos encontramos, como consecuencia de la cantidad de luz solar que conlleva cada una de ellas.

Por ejemplo, existen personas que se deprimen principalmente en las estaciones de otoño-invierno, por la baja luz solar que estas poseen, siendo días más cortos y con menos luz. Incluso, se postula que una de las razones por las que los adultos mayores presentarían altas tasas de depresión, podría deberse a los lugares que ellos habitan, que generalmente son oscuros, sin mucha luz solar.

Este diagnóstico presenta síntomas como: aumento del sueño, desesperanza,  menos energía y capacidad para concentrase, baja motivación, aislamiento social, tristeza e irritabilidad; y por esta razón es recomendable en esta fase, para evitar este tipo de problemas, un tratamiento del diagnóstico que puede incluir a fototerapia,  farmacoterapia y terapia psicológica.

Por Pamela Angulo Díaz

Psicóloga, Licenciado en Psicología y directora de escuela de Psicología de la Universidad Santo Tomás Temuco.

Editor

Entradas recientes

¡Las papas fritas serían chilenas!: estudio histórico sitúa su origen en Nacimiento en 1629

Un banquete en el Fuerte de Nacimiento, tras la liberación del soldado español Francisco Núñez…

2 horas hace

Villarrica: Autoridades constatan avance de obras de mejoramiento de tres plazas del Programa Quiero Mi Barrio Faja II

Las autoridades regionales y comunales realizaron una visita a las obras del proyecto “Mejoramiento Plaza…

2 horas hace

Autoridades inspeccionan obras de reposición del edificio consistorial de Angol

En su etapa final, la nueva infraestructura representa una inversión superior a los $9.200 millones…

2 horas hace

Diputado Becker es confirmado como candidato a senador: “Lo asumo con humildad, para trabajar y representar a mi querida región”

El Consejo Nacional de Renovación Nacional (RN), confirmó a Miguel Becker como candidato al Senado,…

3 horas hace

L’Oréal Groupe Chile y el Servicio Nacional de la Mujer y la Equidad de Género firman convenio para ampliar el impacto del programa “Belleza por un Futuro”

La iniciativa se desarrolla en Chile desde 2015 y busca abrir nuevas oportunidades de desarrollo…

4 horas hace

¡Palabras que juegan! Araucanía en 100 palabras celebra el día de la niñez con talleres mágicos en librería Piuke

Un viaje de papel e imaginación: niños y familias crearán los clásicos muñecos de papel…

5 horas hace